Si te imaginas un lugar donde el tiempo parece haberse rendido, probablemente estés pensando en Brujas. Calles adoquinadas, canales que reflejan tejados inclinados y bicicletas que suenan como si el siglo XXI no hubiera llegado aún. Brujas no es grande, pero tampoco se deja recorrer con prisas. Hay demasiados rincones bonitos, demasiados escaparates tentadores y demasiadas cervezas esperando en bares acogedores.
Elegir dónde dormir aquí no es solo una cuestión de logística, sino de atmósfera. Puedes alojarte en el centro medieval y sentirte dentro de una postal, o irte a barrios más tranquilos y descubrir la Brujas de los locales. La mejor zona donde alojarse en Brujas no es la misma para un romántico empedernido que para un viajero práctico. Así que, si estás pensando en pasar una o dos noches en esta joyita flamenca, toma nota.
¿Cuál es la mejor zona donde alojarse en Brujas?
Centro histórico
Dormir en pleno corazón de Brujas es como quedarte a dormir en un museo vivo. Todo está a mano: la Plaza Mayor, la torre Belfort, los canales y las tiendas de encaje (sí, aquí todavía se vende encaje). Además, pasear de noche por el centro, cuando los grupos de turistas ya se han ido, es casi mágico.
Hay hoteles con tanto encanto como historia. El Hotel Dukes’ Palace es el más impresionante: una residencia real reconvertida, con jardines privados y habitaciones que parecen sacadas de un cuento. El Hotel de Orangerie, con vistas al canal y una decoración que combina lo clásico y lo elegante, es perfecto para parejas. Más pequeño pero muy bien ubicado, el Hotel Acacia ofrece comodidad y cercanía sin perder el toque local.
Si solo vas a estar una vez en Brujas, dormir aquí es ir a lo seguro. No hay margen de error: todo es bonito, fotogénico y a cinco minutos andando.
Otras zonas donde alojarse en Brujas
Minnewater
Minnewater es como el susurro romántico de Brujas. A orillas del Lago del Amor, rodeado de árboles, cisnes y silencio, es el sitio ideal para escapadas en pareja o para quienes buscan tranquilidad sin alejarse del centro.
Aquí puedes dormir en el Hotel Begijnhof, pegado al famoso beguinaje, con jardines verdes y aire contemplativo. También está el Hotel Montanus, que mezcla modernidad discreta con un jardín donde desayunar se convierte en ritual.
Sint-Michiels
Sint-Michiels está fuera del casco histórico, pero a un par de paradas en bus o un paseo en bici. Es una zona residencial, con supermercados, parques y ambiente local. Ideal si prefieres evitar los precios altos del centro y sentirte “en casa”.
El Velotel Brugge es una buena opción: moderno, amplio y con alquiler de bicis. Si viajas con niños o en grupo, el Green Park Hotel Brugge tiene habitaciones grandes y parking, algo nada común en la ciudad.
Assebroek
Assebroek es el barrio que eliges si vienes con presupuesto ajustado y no te importa caminar. Está al este del centro, a unos 20 minutos a pie. Tiene ambiente tranquilo, tiendas locales y esa sensación de estar donde vive la gente de verdad.
El B&B 1669 es una casa típica flamenca reconvertida en alojamiento con carácter. También destaca el Hotel Olympia, sencillo, limpio y bien comunicado por bus.
Sint-Gillis
Sint-Gillis es pequeño pero con personalidad. Casas de ladrillo rojo, alguna que otra galería escondida y mucho silencio. Está justo al norte del centro, así que puedes ir y volver caminando en pocos minutos.
Aquí encontrarás el Hotel Fevery, un alojamiento eco-friendly con dueños amables y desayuno casero. También el Jacobs Hotel Brugge, que combina comodidad con precios razonables en un edificio con historia.
Nuestra recomendación sobre donde alojarse en Brujas
La mejor zona donde alojarse en Brujas no tiene una sola respuesta. Depende de si prefieres el bullicio encantador del centro, la calma de Minnewater o la comodidad funcional de Sint-Michiels. Brujas es pequeña, así que estés donde estés, todo queda cerca. Pero claro, dormir frente a un canal, con los reflejos titilando en el agua, tiene su qué.
En mi caso, volvería al centro sin dudar. No por comodidad, sino por el privilegio de abrir la ventana y ver historia viva. Y sí, puede que la mejor zona donde alojarse en Brujas sea también la más evidente, pero a veces lo evidente es lo que funciona.
Elijas lo que elijas, lo que te vas a llevar de Brujas es esa sensación de estar en otro tiempo. Uno con menos prisas, más chocolate y mucho más encanto.