Carcassonne es un sitio que parece una maqueta medieval montada por alguien con demasiado tiempo y buen gusto. No es grande, pero tiene un poder de atracción que te deja medio hipnotizado. La primera vez que vi la silueta de la Cité desde lejos, pensé que me había metido sin querer en una película de fantasía medieval… o en un parque temático bien hecho, que no es lo mismo. Todo gira en torno a sus murallas, sus torres puntiagudas y ese ambiente de otro siglo que sigue ahí, incluso cuando te cruzas con turistas comiendo helado de lavanda.
Si estás pensando en dormir aquí, ya te aviso: la elección de zona puede cambiarte la experiencia. Porque no es lo mismo quedarte dentro de la Cité, con vistas a las almenas, que en un hotel funcional cerca de la estación. Yo me alojé en dos sitios distintos y la diferencia fue abismal. Así que sigue leyendo si quieres saber cuál es la mejor zona donde alojarse en Carcassonne… y por qué deberías reservar con tiempo.
¿Cuál es la mejor zona donde alojarse en Carcassonne?
La Cité
Dormir dentro de la Cité es como pasar la noche en un decorado… pero de los buenos. Nada de cartón-piedra: aquí todo huele a piedra antigua, a historia que no se ha lavado los dientes desde el siglo XIII. Y eso, créeme, tiene su encanto. Por la noche, cuando se van los grupos organizados y bajan las luces, la ciudad amurallada se queda para ti. Te puedes perder por sus callejones adoquinados con la calma de quien se ha colado en un lugar cerrado al público.
Yo me quedé en el Hôtel de la Cité & Spa MGallery, y si puedes permitírtelo, no lo dudes: es el hotel estrella dentro de la muralla, con jardines, piscina y unas vistas que te hacen sentir noble por un día. También está el Hôtel du Château & Spa Gem, justo frente a la entrada de Narbona, con un rollo más moderno pero igual de especial. Y si vas con presupuesto medio, Les Florentines o Le Donjon – Coeur de la Cité ofrecen mucho por lo que pagas. Todo aquí tiene un aire de película de capa y espada.
Otras zonas donde alojarse en Carcassonne
Alrededores de la Cité
Si prefieres dormir cerca, pero sin meterte de lleno en el decorado medieval, esta zona es perfecta. Puedes ver la Cité desde tu ventana sin pagar precios tan altos, y en cinco minutos estás cruzando el puente levadizo. Lo mejor es que aquí hay más espacio, algo de tranquilidad y hoteles con parking (detalles que uno empieza a valorar después de cargar maletas bajo el sol de agosto).
Uno de los más recomendables es el Hôtel Montmorency, con una decoración entre lo rústico y lo chic, y también el Mercure Carcassonne La Cité, que combina buena ubicación y servicios sin pasarse de caro. Si vas en coche o viajas en familia, esta zona tiene el equilibrio perfecto.
Bastide Saint Louis
Aquí entras en otra Carcassonne: más urbana, más real, menos turística. La Bastide es la parte baja, construida en forma de cuadrícula, con plazas, mercados y gente local que vive ahí de verdad. No tiene la magia visual de la Cité, pero tiene alma, cafés con terraza, y una vida que no se apaga al caer la tarde.
Yo me quedé en el Hôtel Astoria, modesto pero cómodo, a un paso de la estación. También tienes el Hotel Central, bastante funcional, y el SOWELL Hôtels Les Chevaliers, con vistas a la muralla desde algunas habitaciones (lo cual es un puntazo). Esta zona es ideal si buscas algo más barato y auténtico.
Cerca de la estación (Canal du Midi)
Para quienes llegan en tren o buscan moverse con facilidad, alojarse cerca de la estación tiene sentido. No es la zona más bonita, pero sí práctica. Estás junto al Canal du Midi, que tiene su encanto para pasear al atardecer, y además puedes ir andando tanto a la Bastide como a la Cité sin problemas.
Aquí destaca el Hôtel Terminus, clásico, con un aire retro y techos altos. También está el Hôtel Bristol, con vistas al canal, perfecto si te gusta arrancar el día con una caminata entre barquitos. No es la zona más glamurosa, pero cumple y a buen precio.
Montlegun y otras afueras
Si viajas en coche y buscas silencio total, puedes mirar hoteles en las afueras, como Montlegun. Aquí el paisaje cambia: colinas, viñedos y algún hotel con piscina donde desconectar del todo. Uno interesante es el Hôtel Pont Levis, que aunque está cerca de la Cité, tiene ese aire de escapada rural con estilo. No lo recomendaría para una primera vez en Carcassonne, pero sí si ya conoces la ciudad.
¿Entonces, cuál elijo donde dormir en Carcassonne?
La mejor zona donde alojarse en Carcassonne depende de tu plan. Si es tu primera vez, no lo dudes: quédate en la Cité o justo a su alrededor. Es donde el encanto está concentrado y donde dormir se convierte en parte del recuerdo. Si buscas más vida local o precios más bajos, la Bastide o la zona de la estación te funcionarán mejor. Y si eres de los que necesitan oír grillos por la noche, sal a las afueras.
Sea cual sea tu elección, reserva con tiempo, especialmente en verano o puentes largos. Carcassonne se llena rápido. Y recuerda: a veces, un buen hotel con buena vista te cambia el viaje entero.
Última pista del viaje a Carcassonne
Si tuviera que darte solo un consejo sería este: pasa al menos una noche dentro de las murallas. La ciudad cambia de cara al anochecer, y despertarse con las torres al otro lado de la ventana no tiene precio (aunque sí lo tenga). Y sí, como te prometí, aquí va la séptima y última vez que te lo digo: la mejor zona donde alojarse en Carcassonne está dentro de la historia… literalmente.